Castañas: Beneficios para la salud

Las castañas pueden parecer un fruto seco común y corriente, pero hay una serie de importantes beneficios para la salud, incluida su capacidad para mejorar la salud digestiva, fortalecer los huesos, controlar la diabetes, proteger la salud cardiovascular, estimular el sistema inmunológico y reducir la presión arterial. Las castañas también aumentan la cognición y previenen enfermedades crónicas.

¿Qué son las castañas?

Las castañas son frutos comestibles producidos por los árboles y arbustos del género Castanea, que se encuentran comúnmente en todo el hemisferio norte. Si bien hay varias especies diferentes de castañas, la mayoría posee cualidades y perfiles nutricionales similares. No deben confundirse con las castañas de Indias, que son bastante diferentes. Hay varias maneras diferentes en que se usa el castaño para obtener beneficios para la salud, aunque la fruta del árbol (la castaña misma) es posiblemente la más popular.

La castaña tostada es particularmente popular, pero las castañas también se se hierven, se hacen puré o se muelen en harina para hacer pan. También es posible cocinarlas a la parrilla, al vapor o incluso fritas, entre muchas otras preparaciones. Se disfrutan en todo el mundo por su sabor único y son elogiadas por su riqueza de nutrientes importantes.

Las castañas proporcionan altos niveles de fibra dietética, minerales, grasas «buenas», vitaminas, nutrientes, compuestos antioxidantes y otros componentes importantes que conforman una dieta saludable.

Beneficios para la salud de las castañas

Ahora profundicemos un poco más en los beneficios para la salud de las castañas.

Previenen la diabetes

Muchas personas desconocen el papel significativo que la fibra dietética puede desempeñar en la regulación, prevención y control de la diabetes. Los alimentos con alto contenido de fibra dietética, como las castañas, se consideran alimentos con bajo índice glucémico, lo que significa que provocan que el nivel de azúcar en la sangre aumente más lentamente. Esto ayuda a prevenir los picos y las caídas en el azúcar en la sangre que pueden ser peligrosas para los pacientes diabéticos y, a menudo, son precursores del desarrollo de diabetes en aquellos que actualmente no están afectados.

Impulsas el sistema inmune

La alta concentración de vitamina C y otros compuestos antioxidantes en las castañas las hacen un impulso ideal para su sistema inmune. La vitamina C no solo estimula la producción de glóbulos blancos, sino que también actúa como un antioxidante, buscando radicales libres dentro del cuerpo y neutralizándolos antes de que puedan causar la mutación de células sanas o inducir estrés oxidativo cerca de órganos vitales. Esto puede ayudar al sistema inmunológico a enfocar sus esfuerzos en los patógenos y prevenir enfermedades.

Aumentas la densidad mineral ósea

El cobre y el magnesio no son en lo primero que se piensa cuando se trata de la salud ósea, pero el cobre es extremadamente importante en el proceso por el cual el cuerpo absorbe el hierro, que también es crucial para el crecimiento y desarrollo de los huesos. El magnesio también es muy bueno para aumentar la densidad mineral ósea, junto con una amplia variedad de otros beneficios para la salud. Con estos minerales vitales que se encuentran en las castañas, puede prevenir o retrasar la aparición de muchos trastornos relacionados con la edad, como la osteoporosis.

Alivian los problemas digestivos

Las castañas tienen uno de los contenidos más altos de fibra dietética en el mundo de los «frutos secos», lo que significa que son aliados poderosos en cualquier lucha gastrointestinal. La fibra dietética ayuda a estimular el movimiento peristáltico en los intestinos, regulando así las deposiciones y previniendo la inflamación y la incomodidad. La fibra dietética también puede ayudar a optimizar la absorción de nutrientes, lo que significa obtener más de los alimentos que consume y mejorar su perfil nutricional general.

Mejoran la función cerebral

La función cerebral y la cognición se mejoran de varias maneras a través del consumo de castañas. En primer lugar, estos frutos secos son ricos en vitaminas de la familia B (por ejemplo, folato, riboflavina, tiamina) que están directamente relacionados con el desarrollo y una función neurológica adecuada. Además, el potasio que se encuentra en las castañas puede aumentar el flujo sanguíneo al cerebro y promover una buena salud del sistema nervioso, aumentando así la concentración, la retención y la memoria.

Contribuyen a la prevención de enfermedades crónicas

Las enfermedades crónicas de todo tipo son causadas por la liberación de radicales libres, los subproductos naturales de la respiración celular. Estos pueden causar la mutación de células sanas, lo que podría desencadenar en cáncer, estrés oxidativo y una serie de enfermedades crónicas. Con antioxidantes como los que se encuentran en las castañas, nuestro cuerpo estaría librando batallas en muchos frentes, por lo que es una buena idea aumentar sus defensas con un puñado de castañas al día.

Controlan la presión arterial

Cuando se trata de reducir la presión arterial, pocos minerales son tan esenciales como el potasio. El potasio controla el movimiento del agua dentro del cuerpo y también funciona como un vasodilatador, lo que aumenta el flujo sanguíneo y libera la tensión en vasos sanguíneos y arterias constreñidas. Esta reducción en la presión arterial puede aumentar la salud cardiovascular general y disminuir el riesgo de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.

Mejoran la salud del corazón

Muchas personas piensan que las grasas son algo malo y difícil de quemar durante una dieta, pero de hecho, nuestro cuerpo necesita una cantidad de otras grasas para funcionar normalmente. Estas grasas buenas, que se encuentran en altas concentraciones en las castañas, ayudan a equilibrar el colesterol, reducir la inflamación en todo el cuerpo y reducir el riesgo de aterosclerosis y acumulación de coágulos de sangre en el cuerpo. Esto reduce el riesgo de ataque cerebral, ataque cardíaco y enfermedades coronarias en mayor medida.

Precauciones y advertencias

Muchas personas padecen alergias a los frutos secos de diversa gravedad, así que ten cuidado al agregar una un fruto seco nuevo, como la castaña, a tu dieta. Habla con tu médico o un alergólogo antes de cambiar tu perfil nutricional, particularmente cuando puede contener un alérgeno potente. Si no padeces alergias a los frutos secos de ningún tipo, ¡asa castañas y disfruta de los beneficios que ofrecen!